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Foto del escritorluisa fonseca

El ruido-Patricia Marulanda

Se despierta a las 5 a.m. y siente el frío matutino de Bogotá. Con prisa se arregla para ir a su trabajo. Al llegar al set, saluda a los productores, directores y participantes de un reality. Coordina a sus asistentes como un general del ejército con voz de mando, aunque tiene la dulzura de la mujer antioqueña.


Solo tiene 10 minutos de almuerzo para optimizar tiempo y luego corre a un set de novela hasta las 12 p.m. 20 años en este corre, corre hacen que Patricia Marulanda, la especialista en maquillaje, tome una decisión, precipitada para muchos, pero para ella significa la libertad: renuncia al Canal en el trabaja.

Su vida inició en el campo, siempre pendiente de los animales, como ella dice, “aprendí a cuidarlos, a ordeñar las vacas, curarles las heridas, inyectarlas, bañarlas, recoger los huevos, de hecho mi papá creía que iba a ser veterinaria por mi afecto a los animales”, esto la formo como toda una campesina, y como sus padres le enseñaron a valerse por sí misma, era común la competencia con sus hermanos cuando recogían el café, ganaba quien más canastas recogía, era tal la competencia, que los cafetales quedaban terribles ya que por estar corriendo para ganar, dejaban los cafetales roídos.


Tiempo después quiebra la finca, el papá de Patricia pide ayuda económica, no la consigue, deciden trasladarse de ciudad, llegan a Medellín y a pesar de que ella nunca se caracterizó por ser la mejor estudiante decidió terminar su bachillerato estudiando por las noches y trabajando en el día. “yo vendía hasta un hueco y me recorría con mi moto todo Medellín” en ese trajín se acerca a la estética, dice: “una tía tenía una peluquería y como yo era muy vanidosa, me interese por el mundo de la estética e inicié a trabajar allí con mi tía”, pero como tenía claro el gusto por el arte, aprendió a tocar piano, pintaba empíricamente con algún éxito, y finalmente encontró el maquillaje que le tocaba su lado artístico por lo que decidió hacer cursos de maquillaje, de peinado que le permitió participar y ganar un concurso de peinado artístico.


El gusto por su trabajo le permitió adquirir buena experiencia, que a su vez le genero muchos clientes por lo que decide colocar su propia peluquería en el Barrio la Nueva Villa de Aburrá, ganaba buen dinero que disfrutaba, entre otros, viajando con amigas a la costa y dándose algunos lujos para salir como ella dice: “era toda pinchadita”.


Conoció a un chico, modelo, de quien se enamora perdidamente y terminan de novios, él la convenció de mudarse a Bogotá, allí conoce al manager y maquillador de Amparo Grisales con quien tomó un curso de maquillaje, considera que es el hombre que le abrió las puertas a su vida profesional, la invitó a un evento muy importante al que asistieron varias modelos, algunas al reconocerla se desmaquillaron para pedirle que ella las maquillara, allí mismo, la productora de televisión Amparo Gutiérrez le propuso que trabajara con ella en centro televisivo, ahí inicia su vida profesional como maquilladora de presentadores y artistas y extras de TV.


Tiempo después llega uno de sus grandes amores, quien fue instruido por Jorge Paredes y quien le enseña la caracterización de personajes, ello implicaba hacer maquillaje, hacer muñecos de látex, preparar pelucas, buscando el trabajo perfecto. En el programa los reencauchados la caracterización era la base de los personajes lo que exigía talento y arte, algo que si había en Patricia, allí pudo desarrollar su vocación y aprendió mucho.


El programa, los rencauchados se acabó por lo que Patricia se queda sin trabajo, pero al poco tiempo conoce a Juana Uribe quien le ofrece la dirección de maquillaje y caracterización en RCN, donde permaneció durante 20 años.


20 años en los que trabajó en La Banda Francotiradores, llega también a su vida el humor, conoce varios humoristas, recuerda que en ese momento le apasiono aún más la caracterización, “transformar a una persona cómo Camilo Cifuentes, en Michael Jackson, implicaba en 2 horas para convertir la nariz que él tiene, grande, en una chiquita, eso me encantaba, aunque a él le daba dolor de cabeza”. Caracterizar dice ella, fue muy gratificante y más aún, cuando la gente en la calle creían que los personajes caracterizados eran los reales, ello le hacía sentir que su esfuerzo era valorado y reconocido por los demás.


Debido al excelente trabajo que hacía con cada uno de los personajes que los humoristas representaban, poco a poco Patricia fue ganando fama en caracterización por lo que diferentes actores le pedían asesoramiento cuando realizaban castings, un caso que ella recuerda, “Santiago Alarcón me pidió una asesoría para hacer el personaje de Garzón, y finalmente ganó el casting”.


La experiencia en la caracterización de los personajes que ella preparaba le generaron gran reconocimiento en el medio, lo que le abrió espacio dando clases en protagonistas de novela, clases de maquillaje y caracterización, igualmente RCN la envió a dictar capacitaciones en programa de Panamá llamado, TV NEX. La revista Aló en el 2008 le dio un reconocimiento en caracterización.



El amor por su trabajo y las ganas de emprender que tenía, le impulsan a crear empresa, ella y su amiga, Luz Amparo Alvarez, decidan iniciar su propia Empresa de Maquillaje, Cosméticos y Pasarela, pero debido al poco tiempo que tenía Patricia por estar enfocada en RCN, y Luz Amparo al estar enfocada en sus programas de humor, decidieron entregar la empresa a terceros, y finalmente el momento que nadie desea llegó, la empresa quebró, o como ella dice “me di el lujo de quebrar una empresa” y si bien ella lo dice con humor, es un lujo que pocos se pueden dar.


Como empresaria aprendió bastante, no solo porque se dio cuenta que una empresa conlleva tiempo, sino que la inversión que se debe hacer es muy grande, no obstante que su sueño de ser una gran empresaria se detuvo un poco, ella sigue en la lucha, intacta y con las ganas de volver a emprender con la belleza y los cosméticos, y porque gracias a esta experiencia el chip de los negocios cambio, pero para bien.

RCN a pesar de ser un obstáculo por los extensos horarios de trabajo, indudablemente que fue una gran oportunidad de trabajo experiencia y para conocer famosos, hacer amistades, como el caso de Carolina Soto quien se conoció con patricia hace 10 años en una pasantía en el canal RCN, y tiempo después se encontraron y terminaron tomando café, trabajando, e incluso viviendo juntas, dice Carolina, “Patricia y yo llegamos a ser muy unidas y nos contábamos nuestros problemas de chicos, del trabajo de todo” Carolina describe a Patricia como una mujer luchadora, que siempre todo lo que hace lo hace impecable.

Carolina describe que el canal descargo mucho trabajo en Patricia y a pesar de que trabajaba muy bien y siempre con una sonrisa, Carolina la veía agotada.


Agrega Carolina, que Patricia siempre fue una parte importante para muchos en RCN, no solo porque era la directora de maquillaje y tenía que estar pendiente de todo sino también por su don de gentes, le daba consejos a todas las chicas, ánimo y apoyo a quien se lo permitía, pero como cualquier persona, Patricia se cansó de tanto trabajo y responsabilidad.

Luego de 20 años trabajando con RCN, Patricia se da cuenta que no puede más, el trabajo la absorbía, casi no dormía, sentía que no tenía fuerzas para volver al trabajo, su calidad de vida era pésima solo tenía tiempo para RCN., y aunque tenía seguridad económica y ganaba un buen sueldo, este no justificaba la vida que llevaba invadida por estrés, trabajo y más trabajo, así que decide renunciar a inicios del 2019 para enfocarse en ella sin olvidar su condición de emprendedora y el propósito de aprender nuevas cosas, seguir adelante, por lo que afirma: “en este momento quiero ser la mejor conferencista, estoy muy feliz porque estoy haciendo muchas cosas que me gustan, y aunque mucha gente dice que uno debe enfocarse en una cosa para hacerla bien, yo les digo que lo importante es ser organizado y tener una rutina diaria”. Se ve el talante de Patricia cuando afirma que puede hacer varias cosas por su capacidad de organización esfuerzo y entrega para hacer las cosas bien como se lo han reconocido.


Su instagram es ejemplo del amor, amor por sí misma, que ha aprendido después de renunciar a RCN ya que al entrar a esta red social donde siempre se ven mil prototipos de mujeres y usualmente se estigmatizan muchas cosas frente a la mujer, ella es la luz en esa oscuridad, ella le transmite a las mujeres amor propio, empoderamiento, aprender a cuidarse por medio del maquillaje, la ropa, la comida para quererse y ser feliz por lo que cada mujer es, no esperar la aprobación de nadie, y mucho menos hacer cambios a causa de alguien o por alguien.


La rutina de Patricia en esta cuarentena es levantarse agradecer, luego buscar ideas de maquillaje para inspirarse, hace ejercicio, dictar sus conferencias y clases de maquillaje, y a pesar de estar en cuarentena y sin empleo fijo, no ha tenido problemas de ingresos, lo único que ha sido un poco difícil para ella son las conferencias ya que hablarle a un circulito y dar por hecho que hay gente a la que posiblemente le está gustando la charla, es difícil para ella porque le gusta ver a la gente y que sean participativos, dice al respecto: “las primeras veces de mis conferencias, entre a la plataforma y me di cuenta que solo habían 20 persona, y que oso, pero al finalizar la moderadora me felicitó y me dijo que habían entrado 1.500 personas y esto me impresionó y me dio mucha alegría”


Lo que cuanta Patricia debe ser un referente para lo que muchos están pasando en esta cuarentena, al no saber cuántos asistentes hay en la conferencia o en la clase o si prestan o no atención a lo que se dice o enseña lo que puede resultar frustrante, pero que para ella ha sido una nueva forma de reinventarse y que le permite ver nuevas formas de comunicarse y de adaptarse a las nuevas tecnologías.


Otro aspecto en el tuvo que reinventarse, fue para las clases de maquillaje, “siempre le digo a las chicas que busquen un maquillaje que les guste pero que consideren que es difícil, por lo que les que impriman un rostro y en esa hoja les pido que inicien a aplicar las sombras como si fueran sus ojos, de esta manera cuando acaban se dan cuenta que no es tan complicado, luego pasamos a la cara donde terminan haciendo ese maquillaje que les gusto y se dan cuenta que no fue tan difícil”.


Con esta pedagogía Patricia se ha reinventado en esta cuarentena para dictar sus clases, no solo porque es una técnica innovadora para tomar una clase de maquillaje sino también porque les muestra desde otra perspectiva lo fácil que puede ser el maquillaje, por difícil que parezca.


En este momento ella siente que está pasando por el mejor momento de su vida ya que hace muchas cosas, pero cada una la está haciendo bien, es su carácter y personalidad, se siente feliz dictando clases, dando conferencias, haciendo el podcast desde su instagram, donde empodera a las mujeres, da consejo responsablemente de alimentación, de vestir, de maquillaje y lo más importante para ella, comparte un poquito de su alegría.


En un futuro cercano tiene planeado iniciar su canal de Youtube e iniciar su podcast en Spotify, donde va a compartir sus conocimientos de coaching de imagen, de maquillaje y caracterización y también firmó un contrato para ________una película y tiene pensado recibir cada año una o dos películas ya que a pesar de haber salido de RCN no quiere dejar de lado los medios y los medios tampoco la quieren dejar ir.


Una mujer campesina echada pa-lante con un gran amor al arte, la estética, el maquillaje y la caracterización, o como ella misma se define “una loca de la vida” o como la define una de sus grandes amigas Carolina Torres “perseverante y emprendedora pero en realidad ella es un ángel, Patricia es una persona única que en todo momento está ahí para todos, no es envidiosa, siempre quiere ayudar, nunca mira si va a recibir algo de la otra persona, es muy generosa y todo lo hace con amor”.


Ella es Patricia Marulanda, quien ha disfrutado cada una de las etapas de su vida en ámbitos distintos e interesantes como lecciones de vida y que a pesar de los mil obstáculos que se le han presentado a lo largo de su vida, ha sido feliz, y sigue siendo feliz, con ganas de perfeccionarse, aprender, enseñar y poner un granito de tanta sabiduría como ejemplo de vida.






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